El portero del Cádiz CF Virgili, Álvaro Mota, continúa el proceso de recuperación por un traumatismo que sufrió en el maxilar la pasada semana en una sesión de entrenamiento, teniendo que ser trasladado al hospital San Rafael de urgencia donde se le realizaron pruebas radiográficas que descartaron la fractura.
Con el parte médico el Área de Fisioterapia del club, que dirige Manuel García, se puso manos a la obra para realizar un tratamiento de terapia manual y de ejercicio activo, que se ha combinado con terapia inductiva de alta energía, gracias a la colaboración con Kinesys25.
La terapia inductiva de alta energía es una tecnología de última generación que consiste en una onda de resonancia ultrapotente que influye directamente en el metabolismo celular, acelerando la recuperación, y también trabaja a nivel de mejora del dolor debido a que la onda produce una despolarización del nervio y actúa a nivel de sistema nervioso.
El jugador pudo disputar varios minutos en el partido contra la Asociación Jerez Futsal el pasado domingo y estará disponible para ser convocado por Déborah Fernández, si lo considera oportuno, este fin de semana contra el CD Victoria Kents FS, en el partido que se jugará en la localidad malagueña de Alhaurín de la Torre.